Las nueces que disfrutamos en nuestra mesa son el resultado de un largo proceso natural, lleno de paciencia, conocimiento y respeto por la tierra.
En Monte Sesma, cada nuez que cultivamos sigue un cuidadoso ciclo agrícola que garantiza su calidad, sabor y valor nutricional.
Hoy te invitamos a conocer las principales etapas del cultivo de nueces, desde la plantación del nogal hasta la recolección de sus frutos.
1. Preparación del terreno y plantación
Todo comienza con la elección del terreno:
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Los nogales necesitan suelos profundos, bien drenados y ricos en nutrientes.
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Se preparan surcos amplios para garantizar un buen desarrollo radicular.
La plantación se realiza en primavera o principios de otoño, dependiendo de las condiciones climáticas, eligiendo variedades de nogales adaptadas al clima de la Ribera Navarra.
2. Crecimiento y cuidados del nogal
Durante los primeros años:
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El nogal requiere riegos controlados para favorecer un crecimiento saludable.
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Se realizan podas de formación para dirigir la estructura del árbol y mejorar su futura producción.
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Se monitoriza el estado sanitario de los árboles, actuando de forma respetuosa con el medio ambiente para prevenir plagas o enfermedades.
Esta fase puede durar entre 4 y 7 años hasta que el árbol alcanza su madurez productiva.
3. Floración y polinización
En primavera, los nogales florecen:
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Aparecen las flores masculinas (amentos) y femeninas, esenciales para la polinización.
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Generalmente, se produce una polinización cruzada entre árboles para asegurar una buena fructificación.
Las condiciones climáticas durante esta etapa son cruciales: una primavera lluviosa o con heladas puede afectar la cosecha.
4. Desarrollo de la nuez
Tras la polinización:
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La nuez empieza a formarse, envuelta en su cáscara verde protectora.
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Durante el verano, el fruto crece y acumula los nutrientes necesarios.
Es un momento clave en el que los cuidados agrícolas deben centrarse en asegurar un buen aporte de agua y nutrientes, respetando siempre los principios de sostenibilidad.
5. Cosecha de las nueces
La recolección suele realizarse a finales de septiembre o en octubre:
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La cáscara verde se agrieta, indicando que la nuez está madura.
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Se utilizan sistemas de vibración para desprender las nueces de los árboles de forma rápida y segura.
Tras la recogida, las nueces se limpian, se secan cuidadosamente para evitar la aparición de hongos, y se almacenan en condiciones óptimas de humedad y temperatura.
6. Selección y envasado
Finalmente:
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Las nueces se seleccionan a mano, asegurando que solo las de mejor calidad lleguen al consumidor.
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Se envasan de manera respetuosa con el producto, preservando su frescura y propiedades naturales.
Cada bolsa de nueces de Monte Sesma es el resultado de un proceso artesanal, que combina tradición agrícola y respeto por la naturaleza.
Conclusión
El cultivo de nueces es un proceso que requiere años de dedicación y un profundo respeto por el ciclo natural de los árboles.
En Monte Sesma, cuidamos cada etapa para ofrecerte nueces frescas, sabrosas y de la máxima calidad, fruto del esfuerzo y la pasión de quienes amamos el campo.
Cuando saboreas nuestras nueces, saboreas también el trabajo, el tiempo y el cariño que ponemos en cada cosecha.